El sector rural de la localidad de Tres Esquinas del Municipio de San Vicente del Caguán, atraviesa por un estado crítico, marcado por un sinnúmero de problemas que obligan a replantear la visión de cómo enfrentar situaciones de solución que conlleven a aprovechar la gran variedad de condiciones positivas que se encuentran.

El mayor problema que ha venido aquejando este sector, es la baja productividad, entendiéndose como la conjugación de la cantidad producida con la rentabilidad generada. Si se tiene en cuenta que ambas van de la mano, no se puede desconocer que el negocio del campo está gravemente afectado y que la oportunidad de vida sana que genera es muy reducida. Si a esto se le suma la baja competitividad de los productos, se puede fácilmente establecer que es una de las grandes causas que hacen que los negocios del campo no sean lo suficientemente productivos y que se tengan que tomar medidas urgentes para transformarlo en lo que realmente debe ser: “una opción licita de vida productiva”.

De acuerdo a esta problemática y al evidenciar que los ingresos de las familias no alcanzan a un salario mínimo mensual legal vigente de ingresos; ASOHECA inició el 31 de enero de 2011 con recursos de cooperación internacional de la USAID (OIM), ASOHECA, Alcaldía Municipal de San Vicente del Caguán y Comité de Caucheros de San Vicente del Caguán y apoyo institucional del SENA, la ejecución del denominado proyecto “Desarrollo Local Rural Empresa y Medio Ambiente para las Comunidades de Tres Esquinas del Caguán, municipio de San Vicente del Caguán, como mecanismo de prevención al desplazamiento”.

Capacitación Laboral: Este componente fue específicamente para 25 personas del corregimiento de tres Esquinas del Caguán, quienes recibieron capacitación durante 600 horas en sistemas agroforestales e injertación de viveros.

Los otros cuatro componentes, son la estrategia integral para el restablecimiento económico de 50 familias a través de:

Generación de Ingresos: Mediante el cual cada familia estableció 2 hectáreas en sistema agroforestal de caucho-cacao-plátano, para un total de 50 nuevos negocios equivalentes a 100 hectáreas.

Seguridad Alimentaria: Cada familia cuenta con una huerta casera de 80 metros cuadrados con una variedad de hortalizas y aromáticas; así como una huerta de pancoger de una hectárea con 10 árboles frutales, plátano y un programa pecuario de 12 gallinas. Gracias a este componente, las familias han reducido sus gastos de la canasta familiar, puesto que en la actualidad, se esta teniendo

una producción entre 8 y 10 huevos diarios, producción de tomate, pimentón cilantro, pepino, cebolla y cebollín.

Adicionalmente, el proyecto se articuló con la OPERACIÓN PROLONGADA DEL SOCORRO Y RECUPERACIÓN “ICBF, ACCIÓN SOCIAL Y Programa Mundial de Alimentos – PMA”. Articulación que consistió en brindar a las familias raciones alimentarias a cambio de la participación de ellas en los procesos de capacitación y el trabajo desarrollado en las unidades agrícolas familiares; así como, también se contó con la donación por parte de la operación de kits no alimentarios como herramientas para el trabajo en las fincas.

El tercer componente es el de Infraestructura social: Mediante el cual realizó la instalación de 50 sistemas sépticos prefabricados para el tratamiento de aguas residuales y de esta manera reducir el impacto de contaminación ambiental y el componente de Salud, a través del cual se han realizado acciones de sensibilización y acompañamiento a las familias acorde con las necesidades de cada una de ellas, capacitaciones sociales.

Este proyecto, se ha convertido en una luz de esperanza para 50 familias, puesto que con él se está generando mano de obra familiar, desarrollo local empresarial, seguridad alimentaria y capacitación agropecuaria e ingresos económicos a corto mediano y largo plazo; factor importante para prevenir el desplazamiento de las familias beneficiarias; ya que actualmente no cuentan con una fuente de ingresos fijos y permanentes, lo cual genera un desarraigo por la tierra.